martes, 26 de febrero de 2013




Cuando somos niños soñamos con cosas pequeñas, sencillas. 
Cuando nos hacemos mayores nuestros sueños cambian con nosotros, y se vuelven complejos, igual que nosotros. Pero los sueños se rompen en pedazos cuando se topan de frente con la realidad. Porque la realidad a menudo es radicamente distinta a como uno cree que es.  Y esa realidad es la que se encarga de poner a cada uno en su sitio.  Porque uno sabe como empiezan las cosas, pero nunca sabe como van a terminar.

Y punto.



Y se dio cuenta de que la vida no era eso, la vida es caer y levantarse, y volverse a caer y volver a levantarse; la vida es alegrarte los viernes y joderte los lunes, y abrazarte a quien te abrace y a quien no te abrace pues no te abrazas y punto, y no pasa nada.

jueves, 7 de febrero de 2013

Dar y recibir.




El amor no es dar sin recibir nada a cambio, esa idea es crucificante. Pues las relaciones son un dar y recibir; ya sean relaciones de amistad, de familia, de amor o de llámalo X. Si nos dedicamos a darlo todo para-por- a los demás, acabaremos sintiéndonos cansados, solos y no queridos.  Rodéate de gente con la que comunicarte, con la que compartas y comparta contigo, a quien quieras y te quiera, a quien puedas valorar y te valore,  con la que aprendas y enseñes…  Pero no te crucifiques.